Aunque no lo creas una simple tacita de agua tibia con miel puede ser muy bueno para tu organismo. No solo es muy bueno para los cantantes para cuidar su garganta, sino también para nosotros y afrontar mejor nuestro día a día.
Las bondades del agua tibia con miel
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Para la perdida de peso
La miel puede ser un buen sustituto del azúcar, lo que te ayudaría a reducir parte de esa ingesta calórica que te hace subir de peso. Además, depura tu organismo y genera sensación de saciedad.
Asimismo, si deseas perder peso de forma saludable, puedes tomar un vaso de agua tibia con miel y un poco de canela al levantarte y en la noche, justo antes de acostarte. De este modo conseguirás acelerar tu metabolismo.
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Para la digestión
Al tomar un vaso de agua tibia con miel en ayunas, las mucosas estomacales e intestinales son mucho más receptivas a los componentes naturales de la miel, a sus enzimas y bioelementos.
El agua caliente ayuda a reblandecer parte de esas toxinas adheridas a los intestinos, favoreciendo su eliminación, una mejor digestión y absorción de nutrientes. Además, la miel actúa como un antibiótico natural, combatiendo bacterias que puedan causarte infecciones estomacales.
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Para el sistema inmunológico
Si eres constante al tomar un vaso de agua tibia con miel, tu sistema inmunológico se irá reforzando con las vitaminas, minerales y aminoácidos capaces de aumentar las defensas. También regula el nivel de cortisol en la sangre, reduciendo el estrés.
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Para las alergias
La miel actúa contra algunos síntomas característicos de las alergias como la tos, la irritación, la sequedad de garganta y el nerviosismo.
