El Observatorio de la Tierra de la NASA alertó en una publicación reciente sobre el aumento de la contaminación del Lago de Maracaibo, ubicado en el noroeste de Venezuela, y expresó su preocupación por la actual situación en uno de los lagos más grandes de América del Sur y uno de los más antiguos del mundo que atribuyen a los derrames de crudo.
“Alguna vez fue una fuente de gran abundancia, particularmente de combustibles fósiles y pescado, para la gente de Venezuela. Ahora, el Lago de Maracaibo es mayormente abundante con la contaminación de las fugas de aceite y el exceso de nutrientes”, señalaron en una nota publicada en su portal web.
Troubled Waters: Venezuela’s Lake Maracaibo is choking with oil slicks and algae. https://t.co/nIUAQsFjuc pic.twitter.com/qP5PpL47PX
— NASA Earth (@NASAEarth) October 4, 2021
En imágenes satelitales captadas en septiembre de 2021, la NASA señala que el Lago de Maracaibo se “arremolinaba con tonos de verde, bronceado y gris que trazaban el flujo de corrientes y remolinos”, siendo las principales fuentes las algas, salidas de sedimentos de los ríos y las fugas de petróleo crudo.

Agregaron que el Operational Land Imager en Landsat 8 capturó la escena el pasado 10 de septiembre, en el que se evidencia un alto grado de contaminación por los derrames.
“Una de las reservas de petróleo y gas más grandes del mundo se encuentra debajo del Lago Maracaibo. Se han perforado miles de pozos en el lago desde la Primera Guerra Mundial, primero por compañías extranjeras y luego por la compañía petrolera estatal de Venezuela. Aproximadamente dos tercios del petróleo producido por el país proviene de esta región”, explicaron.
“Según muchas noticias e informes científicos, la infraestructura de extracción y distribución de petróleo de la región está en muy mal estado. Las manchas han sido una ocurrencia regular en el lago durante años, y el petróleo crudo a menudo llega a las orillas. Los derrames de petróleo son múltiples y continuos, y se pueden detectar fácilmente las fuentes”, dijo Eduardo Klein-Salas, científico de teledetección.