Conocida por muchas de nosotras como la “hormona del estrés”, el cortisol es el principal glucocorticoide del cuerpo; es decir, contribuye a regular los niveles de azúcar en sangre, actúa como anti- inflamatorio, influye en la formación de la memoria y en equilibrar la sal en el cuerpo.
Ahora, ¿imaginemos, el efecto que tendría en el organismo, mantener niveles altos de cortisol?
Los niveles de cortisol pueden varías drásticamente; generalmente son más elevados por la mañana (para mantener al cerebro alerta), y van disminuyendo al transcurso del día”, describe la
Síntomas para estar atento
Demasiado cortisol por un periodo prolongado de tiempo puede conducir a desarrollar síndrome de Cushing (un trastorno de en la producción de esta hormona), y que puede ser causado por un tumor, entre otras cosas.
Para evitarlo, es importante que conozcamos los síntomas que nos indican que nuestros niveles de cortisol son altos:
- Aumento rápido de peso; principalmente en la cara, el pecho y el abdomen.
- Enrojecimiento en el rostro
- Presión arterial alta
- Osteoporosis
- Cambios en la piel (moretones y estrías púrpuras)
- Debilidad muscular
- Cambios de humor: ansiedad, depresión o irritabilidad
- Aumento de sed y ganas de orinar
- Falta de deseo sexual
- Disminución en los ciclos menstruales
Además de respirar y contar hasta 10, hacer ejercicio y mantener una dieta libre de azúcar puede llevarnos a reducir los niveles altos de cortisol.