El embarazo puede causar ciertos malestares como dolor en senos y espalda, hinchazón, cansancio, entre otros; pero sin lugar a dudas, uno de los más tormentosos para la mayoría de las mujeres son las náuseas.
De acuerdo con especialistas de Mayo Clinic, durante el embarazo aumentan los niveles de la hormona coriogonadotropina humana (HGC), la cual está relacionada con las náuseas y los vómitos.
Si estás gestando y estás batallando con náuseas, pon en marcha estos sencillos trucos para darles “jaque mate”.
- Galletas saladas: Serán tus mejores aliadas durante el embarazo. ¿Su efecto? Ayudan a aumentar los niveles de glucosa, mismos que disminuyen durante el primer trimestre del embarazo y causan náuseas. ¡Sentirás alivio con cada bocado!
- El Jengibre: Inhibe la producción de serotonina, que al activarse causa las náuseas, además de agilizar tu metabolismo para una buena digestión. Puedes tomarlo en infusión o en productos que lo contengan como galletas o pan.
- No te duermas ni ejercites después de comer: Hacerlo dificulta la digestión y aumenta el riesgo de tener náuseas. Por más cansada que estés, procura mantenerte sentada o de pie, al menos uno hora después de comer.
- Come frecuentemente: El secreto es que sea en pequeñas cantidades, pues el hambre es una de las causas de las náuseas. Vayas a donde vayas, carga contigo snacks o colaciones. Eso sí, evita los alimentos procesados, grasas saturadas e irritantes, pues tu estómago está más “delicado” de lo normal.
- El Limón: Parte una rodaja de limón y chúpala durante un par de minutos. También puedes exprimir el jugo de dos limones y tomarlo.
