La deficiencia o producción excesiva de yodo en el organismo trae como resultado afecciones en la pequeña glándula tiroides; la cual, de no funcionar correctamente, puede desencadenar diversas afecciones.
Depresión, aumento o pérdida de peso; también inflamación en la zona del cuello (bocio), caída del cabello y debilidad de las uñas. Estas son solo algunas de las alternaciones derivadas del hipo e hipertirodismo. Estas dos enfermedades que afectan principalmente a las mujeres se originan principalmente por factores hereditarios.
Junto a los medicamentos que se toman diariamente, de acuerdo con las indicaciones de diversos especialistas en la materia, es importante consumir ciertos alimentos que beneficien la salud de esta pequeña; pero importante glándula, ya que es la encargada de regular todas las funciones metabólicas del organismo.
La guayaba y las tiroides
Al diagnosticar una anormalidad en el funcionamiento tiroideo, muchos especialistas recetan diversos cambios o ajustes en la alimentación. Una de esas indicaciones en la inclusión de alimentos que contengan una buena cantidad de yodo (dependiendo sea el caso de la alteración) y cobre, mineral que equilibra de muchas maneras distintos órganos y sistemas.
Si bien hay diversas opciones, lo recomendable es elegir hortalizas, carnes, aceites, y otros nutrientes que presenten minerales y microminerales.
En el caso de las frutas, la guayaba se presenta como la mejor alternativa pues contiene los elementos antes mencionados, los cuales permiten controlar la producción y absorción de la hormona.